La brecha digital es una niña afrocolombiana o indígena que no puede acceder a conocimiento y soñar -en su comunidad no tienen internet, dispositivos ni ingresos- y es que la brecha digital es un nuevo analfabetismo, pues pone fuera alcance el acceso a la mejor educación y en consecuencia a una mejor vida.
La brecha digital es: la brecha entre individuos y comunidades que tienen acceso a las tecnologías de la información y aquellos que no. Pero ¿Por qué pasa esto? Sucede debido a tres razones. La primera razón es que las personas no tienen acceso a estas tecnologías porque no pueden pagarlas. La segunda razón es porque no saben cómo usarlas. La tercera porque no conocen los beneficios derivados de la tecnología.
Estas diferencias entre comunidades usualmente se definen en función al género, geográficas y culturales. En este post analizaremos la situación pre pandemia en Colombia de brecha digital respecto al acceso medido de la conexión a internet.
En Colombia para 2019 no existe brecha digital de género, para 2018, un 47% de las mujeres se conectan diariamente, mientras que un 46% de los hombres lo hacían diariamente.
Fuente: DANE: Encuesta de Calidad de Vida 2012-2019.
Cálculos propios
La brecha por pertenencia étnica en Colombia es de 20 puntos porcentuales, mientras que las personas que declaran no tener pertenencia étnica se conectan diariamente un 49%, las personas con pertenencia étnica solo un 29% se conectan diariamente.
Fuente: DANE: Encuesta de Calidad de Vida 2012-2019.
Cálculos propios
El incremento de las personas que se conectan a internet diariamente en la zona urbana ha tenido un ritmo constante en los últimos años, pasando de un 28% en 2012 a un 57% en 2019.
Mientras que en la zona rural, no presentan un avance en la conexión a internet en los últimos años. La creciente desigualdad urbano rural se traduce en una diferencia de 43 puntos porcentuales entre los Colombianos que se conectan diariamente a internet, un 57% de los urbanos frente a un 14% en lo rural.
Fuente: DANE: Encuesta de Calidad de Vida 2012-2019.
Cálculos propios
Es fácil demandar respuestas al Estado, pero en una economía global deprimida por los impactos de la pandemia estás demandas se ven cada vez más irrealizables. Mientras las soluciones de ideales llegan en EducALL no nos cruzaremos de brazos, buscamos resolver las desigualdades de una manera creativa, disruptiva, sin grandes costos y efectiva.
En EducALL creemos como lo hacía Saramago, que: “Las miserias del mundo están ahí, y solo hay dos modos de reaccionar ante ellas: o entender que uno no tiene la culpa y por tanto encogerse de hombros y decir que no está en sus manos remediarlo -y esto es cierto-, o bien asumir que, aun cuando no está en nuestras manos resolverlo, hay que comportarnos como si así lo fuera” Y seguiremos desafiando quijotescamente las brechas educativas, creando tecnologías económicas, accesibles y apropiadas para lograr que ningún niño se quede atrás.